EL PAYASO ESTRAMBÓTICO CONTRAATACA!!!

 
Pero que coño le debe pasar a este señor que no deja de decir sandeces??? Parece que el abuelo se ha levantado sumamente inspirado y ha soltado uno de sus discursitos de rabiosa actualidad, más propios de aparecer en el bando semanal de algún pueblo de una teocracia medieval que en las televisiones de las democracias occidentales del siglo XXI, pero en fin…le siguen dando minutos…!!
 
 Ha empezado el venerable anciano sacándose de la manga 3 nuevos pecadillos para amargar aún más las ya de por si tristes vidas de sus apolillados feligreses. Y a buen seguro que a más de uno le da un infarto:
 
    1- No contaminarás el medio ambiente (so pena de pasar la eternidad violado, sodomizado y mancillado por toda una legión de diablos sumamente desagradables): Amigo Ratzinger, esto de copiar el ideario a los ecologistas para rebañar algunas almas   me parece bastante cutre. Tal vez consigas que alguno de tus nuevos indígenas convertidos a base de bocadillos en continentes poco afortunados evite lanzar un escupitajo al suelo después de la comida, pero…AH!! ¿En manos de quienes están todas las fábricas que contaminan todos los ríos de Europa? Probablemente en las de uno de tus feligreses, que irá a misa cada domingo, seguirá contaminando con su ferrari f355 y pasará olímpicamente de lo que le digas, para variar.  Cambia de estrategia, hombre…a una gente que no se corta un pelo en contratar a niños para hacer pelotas,¿¿los vas a acojonar con un pecadillo ecológico??Seamos serios, por favor.
 
    2 – No consumirás drogas (so pena de pasar la eternidad violado, sodomizado y mancillado por toda una legión de diablos sumamente desagradables): Ahí tenemos un problema. Empecemos por la vaporosa definición del término, por supuesto con el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, que siempre saca de aprietos. Droga:
 
                 a) Sustancia mineral, vegetal o animal, que se emplea en la medicina, en la industria o en las bellas artes. Mmmmm…algo me dice que el inefable Joseph no se refiere a estas.
                      
                 b) Sustancia o preparado medicamentoso de efecto estimulante, deprimente, narcótico o alucinógeno. Creo que sí se refiere a éstas, ¿pero cuales? ¿Por que no ha dado una lista? ¿Como sabrán a partir de hoy que sustancias pueden y cuales no pueden tomar sus sacrificados feligreses? Todos conocemos la heroína, la cocaína y el LSD, pero creo que Ratzinger debería haber de precisado un poco más dada la magnitud del  castigo. Diazepam, rivotril (clonazepam), tafil (alprazolam), victan, zolpidem, oxacepam y otros 8000  nombres comerciales de anfetaminas, ansiolíticos, antiepilépticos, hipnóticos y otras tantas variedades más de medicamentos son utilizados a diario en el mundo tanto con prescripción médica para curar alguna dolencia -que no creo que lo considere pecado-como sin prescripción médica para que algunos cazurros se metan un buen "viaje"-eso ya sí-. ¿Se referiría Ratzinger a las sustancias propiamente dichas o al uso que se les dé? Me temo que el abuelo aun no se ha curado de su obsesión morbosa por censurar el placer ajeno,ya que, dando por supuesto que las grandes catástrofes humanas se la traen mas bien al fresco (¡que bien les va con el VIH en África gracias a sus sabios consejos sobre el preservativo!) deberíamos deducir que, para variar, lo que le da rabia rabiña es que la gente se lo pase bien. Desde pillar una taja hasta echar un polvo. Poco importa en realidad la sustancia o la fórmula, el objetivo real del abuelo es jorobar al personal. Que nadie se engañe. Y los que realmente tienen la desgracia de ser adictos a alguna sustancia…bastante pena tienen ya en esta vida como para encima joderlos toda la eternidad. VAMOOOOOOOOOS HOMBREEEEEEEEEEEEEEE! ESO NO ESTA BIEEEEEEEEEEEEEEEEN!!!
 
     3 – No acumularás demasiada riqueza (so pena de pasar jajajaja la eternidad violado, sodomizado jajajajajaja y mancillado por toda una legión de diablos sumamente desagradables):AJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA JAJAJAJA JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!!!!!!!!!!!!!!!! Perdón, ay, snif..Que decía…pues jijijijiji, que es lo mejor que he oído en mi vida, es realmente divertido. Empecemos sorprendiéndonos por la novedad del anuncio. Recuerdo hace unos 2000 años a un pobre hombre mas bien tirando a comunista que no se cansaba de repetir "Es mas difiiicil que un cameeeello entre por el ojal de una agujaaaaaa…que un soooooolo rico vaaaaaaya a la casa de mi padre".Si levantase la cabeza volvía a palmarla, fijo. Ratzinger, hombre, seamos serios y primero definamos el "demasiada", que es un término aún más subjetivo que "drogas". ¿"Demasiada" sería, por ejemplo, más de la que tenéis en el vaticano? ¿De donde habéis sacado los mas de 500 millones de dólares a pagar a las víctimas de abusos en USA de los últimos 10 años? (por poner un pequeño ejemplo). Quinientos millones de dólares para patearte en prostitución infantil no está nada mal, eh, bribooon? A los que sí les va a dar un infarto va a ser a tus feligreses en países ricos, que coinciden normalmente con los que tienen tanta riqueza acumulada que necesitan un dios en sus mentes que se ocupe de los pobres ,para dedicarse ellos a la dolce vitta con la conciencia tan tranquila. Tantos años disfrutando del paraíso en la tierra y, ¿ahora vienes tu recordarles aquello que en sus vidas habían leído sobre el líder ideológico de vuestro movimiento? Tarde, mal y nunca, es decir, como siempre, amigo.
 
Pero lo mejor no son los pecadillos nuevos, nooooooooooooooooo señoooooor. Benedicto ha estado sembrado también en otros temas. Como de costumbre ha empezado relinchando contra el aborto y la eutanasia (no pienso rebatirlo, me da pereza ya a estas alturas) y luego ha soltado la gran perla: "Una píldora de la inmortalidad crearía un mundo de viejos" y "Una vida biológica eterna sería un espanto". Pero vayamos por partes. Observemos detenidamente las siguientes fotos:
 
VIEJO2
 
 

 
 
 
 
 
 
 
 
¿Que coño tienes que decir de los viejos?? !!Chocante que el presidente del geriátrico mas grande de la tierra esté en contra de un mundo de viejos!!, ¿verdad?. Aunque bromas aparte, parece que para variar el buen hombre lo ha entendido todo mal. Mire, Joseph, el tema no es que vayamos todos envejeciendo eternamente hasta parecer uno de sus cardenales. Se trata simplemente de conocer el genoma humano tan perfectamente como conocemos la mecánica de un coche, y, simplemente, evitar el envejecimiento celular crónico que por desgracia padecemos todos y que nos conduce inexorablemente a la muerte, es decir, a su negocio. Pero por muchas trabas que ponga, amigo, no dude un solo instante que en el futuro sucederá. Tal vez cuando su religión haya pasado a considerarse mitología, lo ignoro, pero repito, no lo dude ni un instante. En lo que sí coincido plenamente es que PARA USTEDES, la industria vende paraísos, seria un auténtico espanto, ya que si la gente no palma, se quedarán tan a dos velas como la farmacéutica Eli Lilly  si se cura la diabetes. (Eli Lilly es la primera fabricante mundial de insulina artificial).
Pero aún peor le pongo a usted el negro futuro que les espera. Con una corrección genética adecuada podremos sin duda vencer el envejecimiento, pero no la muerte. Por simple estadística, cualquier persona que viva 10.000 años será atropellado por un autobús unas 50 veces, circunstancia que dificultará enormemente su eternidad. Así pues el objetivo científico a largo plazo no dude que será despojarnos de estos cuerpos débiles y mortales a base de carbono e introducir nuestras mentes en algún otro artefacto más fiable y duradero. Debo reconocer que no soy un experto en la materia, pero los hay que sí. Le recomiendo la lectura de algún libro magnífico sobre el tema como "La era de las máquinas espirituales" de Ray Kurzweil*(1) :
 Hacia el año 2100: "Hay una fuerte tendencia a mezclar el pensamiento humano con el de la máquina, creada inicialmente por la especie humana. Ya no hay distinción clara entre humanos y ordenadores. La mayoría de las entidades conscientes ya no tienen presencia física permanente. Las inteligencias basadas en máquinas que derivan de modelos extendidos de inteligencia humana afirman que son humanos, a pesar de que su cerebro no tenga como soporte procesos celulares a base de carbono, sino sus equivalentes electrónicos y fotónicos .La mayoría de estas inteligencias no están ligadas a una unidad específica de procesamiento computacional. La cantidad de seres humanos en soporte de software superan con mucho a quienes continúan utilizando la computación neuronal originaria a base de carbono. Incluso entre las inteligencias humanas que siguen usando neuronas a base de carbono es común la tecnología de implantes neuronales, lo que les proporciona una enorme potenciación de sus capacidades perceptivas y cognitivas. Los seres humanos que no utilizan estos implantes son incapaces de participar en conversaciones con los que los utilizan. Puesto que la mayor parte de la información se publica en protocolos de conocimiento normalizados y asimilados, su inteligibilidad es inmediata. El objetivo de la educación, y de los seres inteligentes, es descubrir nuevo conocimiento que aprender. Se discute la finalidad de la femtoingenieria(ingeniería a escala de femtómetros o billonésimas de milímetro). La esperanza de vida ya no es un término viable en relación con los seres inteligentes".
 
De aquí a bastantes milenios: Los seres inteligentes consideran el destino del universo.
Aunque Kurzweil siempre ha sido bastante optimista en cuanto a la proximidad temporal de los acontecimientos, jamás ha fallado una sola predicción -con un margen de unos pocos años-. Tal vez no sea a partir del año 2100  que vivan nuestras mentes eternamente recorriendo el ciberespacio, pero puede que en el 2200, o 2300…todo es cuestión de tiempo.
 
¿Que venderéis entonces Ratzinger? ¿Paraísos de realidad virtual? No creo que vuestro ciberinfierno tenga para entonces muchos voluntarios. Hazme caso, la venta de paraísos es un negocio que está viniendo cada vez más a menos, gracias a la ciencia y a la tecnología. Y es un proceso imparable. Ahora que tenéis una inmejorable salud financiera, tal vez seria bueno que empezaseis a cambiar el producto estrella de vuestra multinacional y dedicaros a sembrar brassica*(2).
 
*(1) Ray Kurzweil es también autor de "La era de las máquinas inteligentes", que ganó el premio de la Asociación Norteamericana de Editores al libro más destacado de informática en 1990. En 1994 se le otorgó el premio Dickson, máximo premio científico de la fundación Carnegie Mellon. En 1998, el Massachusetts Institute of Technology (MIT) lo nombré inventor del año. Ha recibido nueve doctorados Honoris Causa y condecoraciones de dos presidentes de Estados Unidos. Kurzweil vive en Boston, Massachusetts.
*(2) Planta de cultivo de la familia de las Brassicaceae con flores de color amarillo brillante. Se cultiva por todo el mundo para producir forraje, aceite vegetal para consumo humano y biodiésel.

 

 

                                                                                     Dedicado a mi buen amigo y camarada Javi. MANO DURA!!!:P

                                                                                                                                                              – ICR –                                       

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Darwin’s dream.

 
Si en el documental del canal Historia de la entrada anterior nos explicaban el origen el universo, veamos éste otro del Discovery Channel que, aunque en Europa ya lo tengamos más que asumido, nos explica estupendamente nuestros propios orígenes como especie. O sea, de donde hemos salido y que coño pintamos aquí.:).
 
Remarco que en Europa ya lo tenemos asumido porque por suerte para nosotros, el origen de la vida sobre la tierra es un debate cerrado hace ya muchos años y ninguna duda albergan los responsables de la educación infantil en explicar la Evolución Darwinista en sus programas.Por desgracia en prácticamente el 80% del planeta no es así, y se explican desde estúpido animismo en tribus africanas hasta el no menos estúpido "diseño inteligente" en buena parte de USA, pasando por un amplio abanico de idioteces a cual más delirante y peor documentada. Veamos una vez más la REALIDAD de las cosas, documentada obviamente por toneladas y toneladas de pruebas en forma de registro fósil en cualquier estrato geológico que las busquemos. 

   

http://video.google.com/googleplayer.swf?docId=1578949707574359157&hl=es

Para los interesados en el tema, entrad en el link que pongo mas abajo. Es una web muy recomendable.

 

 

                                                                                                                                   – ICR –

 

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The Universe in a nutshell.

 
Mientras muchísimas personas siguen enganchadas a la mitología antigua y a toda una amalgama de estupideces mas o menos ocurrentes, mientras siguen produciendose miles de muertes a diario entre personas que intentan imponer sus absurdas ideas a otras con ideas no menos absurdas,mientras millones de ignorantes en el mundo pierden su tiempo a diario debatiendo sobre si fueron uno,dos,tres o cuatromil dioses con sus dos,tres o quince millones de profetas reencarnados o no en toda una suerte de animales mitológicos,mientras unos esperan ir a paraisos con banquetes y alcohol, otros a paraiso-burdeles con docenas de virgenes,otros a volar libremente con sus alitas de fina pluma de oca y otros se conforman con convertirse en tigre, jabalí, puercoespín o humilde arbusto, os invito a que veais este magnífico documental con las respuestas más exactas que las pruebas disponibles nos pueden ofrecer hoy. Recomiendo encarecidamente el visionado. Es el resumen mejor que se podía hacer; trece mil quinientos millones de años sintetizados en apenas hora y media. Realmente impresionante.
 
 
 
 

 
 
 
 
 O para los que prefirais verlo en pantalla completa : http://tu.tv/videos/el-universo-el-big-bang-1-y-2
 
 O incluso descargarlo para guardarlo (requiere reproductor FLV o conversor a AVI/MPG…):
 
 
                                                                                                                                                               – I.C.R –

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Vaya banda…

 
Estupidizante espectáculo el que nos están ofreciendo una vez más la clase política mundial con el tema de la recién estrenada independencia de Kosovo. Los políticos españoles, siempre con lecturas en clave egocentrista, o la atacan salvajemente desde Madrid como un reflejo alérgico hacia la propia palabra independencia, pero sin más argumentación, o la aplauden ilusamente y sin reservas desde Euskadi y Catalunya por la misma reacción pero de sentido contrario. Ya los conocemos. Este ha sido el único caso en que he oído a José María Aznar opinando lo mismo que Miguel Ángel Moratinos, y sorprendentemente, contradiciendo el discurso de su apreciado "He is my friend!!" George Bush. Obviamente España ha decidido en el consejo no tomar en serio a Kosovo como país, al contrario que el resto de la UE. Pero veamos el porqué.
 
  La opinión unitaria de la  Europa de los 27, y sobre todo en temas que no conciernen directamente a sus países, suele ir marcada siempre por la opinión de Francia y Alemania, "la vieja Europa" en el Aznarismo, por un tema tan simple como que siguen siendo los que "cortan el bacalao" y ningún país tiene intención de quedar mal con ellos por un tema que no les afecta directamente. Pero los tiempos de "la vieja Europa" de  Jacques Chirac y Gerhard Schröder han quedado atrás y ahora se abren los de "la nueva Europa" de Nicolás Sarkozy y Angela Merkel, tan empecinados como lo estaba antes Aznar en lamerle las botas a Bush, que naturalmente, tenía que andar por ahí metido, como en cualquier otro asunto tenebroso.
 
 ¿Cual es el interés de Bush por un Kosovo independiente? (naturalmente dejaremos de lado el discursito de Condoleeza Rice sobre "los íntimos lazos de histórica amistad entre ambos pueblos"). La respuesta es simple: El escudo anti-misiles. EL cuadro de mandos del pentágono ha elegido la ex-región serbia para instalar allá una gigantesca base militar. A partir de ahí ya está todo dicho. Ha tenido de sobras Condoleeza con 2 reuniones para convencer a Europa de la histórica necesidad de independencia del pueblo Kosovar.
 
A veces pienso que es imposible que los políticos sean tan estúpidos, lo cual no es bueno porque los convierte en aún más mentirosos. ¿Se ha molestado alguno en leer algo sobre la historia de los Balcanes? . A mi juicio, la independencia de Kosovo es un disparate del tamaño de un campo de fútbol, y mi opinión nada tiene que ver con casposos chauvinismos territoriales, como creo que he demostrado amplísimamente en este blog.
 
En 1989 cae el muro de Berlín y el socialismo se va resquebrajando en todos los rincones de la Unión Soviética. Albania no fue una excepción y, como sucedió también en el resto de ex-repúblicas socialistas, se produjeron enormes movimientos migratorios. Un numerosísimo grupo de albanos fueron recibidos en Yugoslavia, y se instalaron en la región de Kosovo, en la cual han vivido hasta nuestros días. Las diferencias iniciales con la población autóctona fueron, como no, religiosas. Los serbios eran cristianos ortodoxos en su mayoría y los albaneses solían pertenecer al Islam. Y así han vivido durante 15 años odiándose en silencio por creer en diferentes gurús, y así después de 15 años los inmigrados albaneses han decidido que ese trozo del país en el que no nacieron era suyo y era necesario reclamarlo como independiente. Naturalmente esta proposición habría causado risa en la UE de no ser por Bush y su base militar, ya que la independencia de Kosovo representa crear, ni más ni menos, un estado completamente dependiente de las ayudas exteriores. Su economía depende de las ayudas de la UE, su seguridad de las fuerzas de la OTAN y su gobierno del apoyo directo de Bush, con los enormes riesgos que ello implica para la población civil, totalmente dependiente ahora de la caprichosa y voluble coyuntura política internacional. Por no hablar de meter una base americana fuertemente armada en un nuevo país musulmán. Bush realmente está consiguiendo un mundo más seguro.
 Pero volvamos a nuestras fronteras. Realmente los que se están cubriendo de gloria son los lumbreras de los partidos nacionalistas catalanes y vascos. Ellos que se jactan de su brillante y milenaria historia como país y la exponen como base para su propia secesión (cosa que al autor no le parece ni bien ni mal, o sea, me importa un comino), apoyar una independencia basada en unas elecciones en las que el 50% de electores no residían en ese territorio hace 15 años, es apoyarla simplemente porque el resultado les ha gustado. Y eso es hacer trampa, sobre todo cuando su principal argumento contra un posible resultado negativo del mismo referéndum en sus tierras, se basa en que "la mitad de los que votan no han nacido aquí". Por no decir la risa que les daría que el barcelonés barrio del Raval, poblado actualmente por musulmanes, les declarase la independencia basándose en ese mismo principio, vía democrático referéndum.
 
 Los nacionalismos son  chauvinismos a mi juicio estúpidos e insoportables, ya sean españoles, vascos, catalanes o turco chipriotas y una humanidad globalizada no podrá permitirse en el futuro tener absurdas fronteras que los dividan, pero de momento ahí están, y los movimientos hacia la completa desaparición deben ser cuidadosos y muy meditados. Las modificaciones caprichosas según momentáneos intereses geoestratégicos norteamericanos, como la del caso que nos ocupa, y en la zona más delicada e inestable de Europa, me parecen tan absurdas como peligrosas.
 
                                                                                                                                                                                – I.C.R-
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AUNQUE LA MONA SE VISTA DE SEDA…

 
 
Magnífico documental el que nos ofreció National Geographic la semana pasada a los fans incondicionales de ese canal. Se titulaba algo así como "Matanzas tribales" y en él nos mostraban por que poco se mata la gente en algunos lugares del mundo. En este caso era el África más profunda, pero bien podría haber sido en otros muchos lugares.
 
 Un león avanza sigilosamente por la sabana africana, se para unos segundos y de repente salta como un rayo y se merienda a un tipo distraído que estaba a la sombra de un árbol. A los pocos minutos aparecen dos guerreros que lo acribillan a lanzazos y lo matan mientras hacía la digestión. Parece lo mas normal del mundo y, aunque sea una muerte terrible para el pobre hombre, no es noticia que por poco habitual en África merezca todo un documental. Lo que sí desde luego lo merecía eran los ríos de sangre que habían de venir por ese triste incidente; docenas de muertos de dos tribus que hasta el momento habían sido buenas vecinas, un árbol milenario quemado y un odio visceral que aún les dura muchos años después. Este es el triste balance del desafortunado ataque en cuestión. ¿Como la gente puede volverse loca por un simple accidente? Eso es exactamente lo que intentó explicarnos el locutor, completamente alucinado por la increíble ridiculez de la historia.
 
  Resulta que el tipo distraído al que se comió el león no era un tipo cualquiera, era el brujo animista de la tribu "X" (me perdonarán mis lectores pero no soy capaz de recordar el nombre), y no estaba distraído, sino que estaba rezando. Para colmo de los males no es que le gustase rezar bien fresquito a la sombra de un árbol, sino que estaba allí rezando al árbol propiamente dicho. Era su árbol sagrado y el de toda su tribu, al que acudía regularmente a degollar pollos vivos con la intención de que el árbol le concediese todo tipo de gracias. Hasta este punto el más común de los mortales habrá deducido "pues muerto el perro (el león, en este caso) muerta la rabia, ¿no?, ¡fin de la historia!". Pues no. Por una increíble y retorcida casualidad, el león que se había dado el festín y luego había sido ajusticiado, no era un león sino que era el ex-brujo de la tribu "Y" fallecido poco antes en trágicas circunstancias y ahora reencarnado en fiera. Lo que empezó como un lamentable accidente era ya un doble asesinato! Pero la historia tiene aun más.
 
 ¿Donde murió el león? (perdón, el hechicero de los "Y", no quisiera herir susceptibilidades religiosas). Pues justo encima de las raíces del árbol sagrado de los "X", ya que hacía la siesta a la sombra cuando fue "¿?vilmente asesinado ¿?".La tradición de la tribu "Y"(los familiares del león, vamos) marca inequívocamente que en el lugar donde decide reencarnarse un brujo (o sea palmarla, digamos), será considerado lugar sagrado en adelante para la tribu y deberán ir a rezar allá donde fue enterrado; o sea, ni más ni menos que al árbol bendito de los vecinos, en el caso que nos ocupa.
 
 La matanza se desató ni más ni menos cuando a los lumbreras de la tribu "X" (los del brujo inicialmente devorado) no se les ocurrió otra cosa que levantar una pequeña empalizada de cañas alrededor de su baobab milenario y poner dos guerreros guardianes con la  intención de evitar que los de la tribu "Y"(los leones) lo dañasen al intentar enterrar el cuerpo del malogrado felino. El final de la historia es de imaginar, dado el balance de bajas expuesto tres párrafos más arriba. Me solidarizo totalmente con  el pobre e impresionado locutor. A mi también me alucina.
 
  "Es que en África son incultos","Es que son pobres y no valoran la vida porque no tienen nada","Es que son extremadamente supersticiosos porque no han ido al colegio". Cualquiera de estas frases podría servir de sencilla explicación para la absurda barbarie, pero se me ocurre otro caso análogo que nos puede ayudar a dar con la clave del delirio, básicamente para intentar no repetir los patrones que nos han hecho reír por ridículos en los párrafos anteriores.
 
 Unos 3000 kilómetros al noreste de nuestras beligerantes tribus encontramos otro territorio con una situación ciertamente similar .En él existen también dos tribus enfrentadas desde hace siglos por una situación también surrealista. Resulta que la tribu "X", dueña y señora del territorio desde tiempos inmemoriales, fue desalojada por los invasores de la tribu "Y" hará unos 14 siglos. Durante 1300 años la tribu "Y" vivió pacíficamente en esas tierras, hasta que la tribu "X" consiguió volver por unas razones que ahora no vienen a cuento. Hubo llanto y rechinar de dientes por ambas partes a la hora de repartirse el territorio, pero como no les quedaba más remedio, acabaron por ponerse de acuerdo en numerosas cuestiones. Ahora solo quedaba una por salvar, algo absolutamente innegociable tanto para unos como para otros. En el mismo lugar donde había existido un templo para alabar al dios local de la tribu "X" hacía milenios no se le ocurrió otra cosa al hechicero de la tribu "Y" que subirse a una roca y elevarse a los cielos hará unos 13 siglos. Obviamente los parroquianos de la tribu "Y", impresionados, habían construido un bonito lugar sagrado sobre esas piedras donde honrar a su dios y a su gurú. Como por una inmensa mala suerte, el lugar sagrado de unos se había convertido  por arte de birli y birloque en el lugar sagrado de los otros, exactamente igual que en el caso de las tribus del primer caso. Y exactamente igual acabó la historia, con miles de muertos (las tribus son en este caso más numerosas), empalizadas para defender lugares sagrados con guerreros armados vigilando, y odio eterno y visceral por ambas partes que aún dura.
 
 Sería otro caso igual de "divertido" si el enfrentamiento quedase circunscrito a "cuatro africanos ignorantes", pero si ponemos nombres y lugares al segundo caso nos sale que la tribu "X" son los Judíos Israelíes, la tribu "Y" son los Árabes Palestinos, que el lugar sagrado de la tribu X es el templo de David del que solo queda una pared en pié (el muro de las lamentaciones) y que el lugar sagrado de la tribu "Y" se llama Mezquita de Al Aqsa, construida justo sobre la roca en la que Mahoma despegó hacia la estratosfera, exactamente en el mismo punto donde se alzaba el viejo templo judío. Éste es, ni más ni menos, el conflicto  que desestabiliza al medio oriente -y al mundo entero, de rebote- en la primera mitad del siglo XXI. Y en este caso solo la mitad de los combatientes son pobres e incultos. Casi que deberíamos dejar de considerar la pobreza y la incultura como causa directa del salvajismo y empezar a apuntar al delicadísimo uso compartido de instalaciones religiosas que exigen los dioses a sus feligreses, no creen?.
 
En Europa no consideramos en absoluto peligrosos a los leones; nuestra amígdala cerebral no reacciona aterrorizándonos en presencia de uno como en cambio sí les pasa a las personas que viven en muchos países africanos. ¿Porque esta diferencia? Porque por estos lares no hay fieras carnívoras sueltas desde hace muchísimos años, y las pocas que hay están bien encerradas en la jaula de un zoológico. Tan solo algún loco inconsciente es devorado en Europa de vez en cuando por un león, al saltarse las vallas protectoras de algún parque de atracciones.
 
 

 
Del mismo modo nuestra aletargada amígdala europea tampoco reacciona con pánico ante pensamientos, ideas, o teorías que pueden llevar al ser humano a comportarse como la más irracional de las fieras, como sí les pasa a muchísimas personas que comparten nuestros valores pero que viven en muchísimos otros países (pregunten a Salman Rushdie o a Ayaan Irsi Ali, por citar dos conocidísimos ejemplos). ¿Por qué esta diferencia? Idéntica respuesta a la del párrafo anterior: Porque por estos lares no andan sueltas desde hace muchísimos años ya que gozamos de estados fuertes que las limitan brutalmente, y a que los casos extremos están bien encerrados en sus instalaciones.
 

 
 
…aunque hace algunos años campasen en libertad. (Y parece que lo hemos olvidado por completo).
 

 
 

 
 

 
 

 
 

 
 Realmente tan solo algún loco inconsciente europeo puede llegar a morir actualmente en nombre de una de ellas, y jamás dentro de nuestras fronteras. (El perturbado a punto de morir de septicemia chocantemente es nacido en Alemania, pero va a latigarse a filipinas, ya que en su país obviamente no le dejan).
 

 
 

 

No es necesario ser premio Nobel para darse cuenta del problema real. Pobreza e incultura si son factores que apuntalan el origen, pero no son de ninguna manera la causa la barbarie. La pobreza favorece enormemente la creencia de la gente en algún mundo mejor donde disfrutar lo que en el real jamás han podido soñar , la incultura le abre de par en par a esta idea las puertas de sus mentes, y ambas son características siempre presentes en estados no democráticos (ya sean teocráticos, dictaduras, o democracias impuestas a bombazos). Pobreza e incultura crean un campo abonado a la religión, y esa es la que mata, cada una en nombre de su dios, si un fuerte estado laico y democrático no lo evita. ¿Recuerdan alguna que no lo haya hecho cuando tenía la oportunidad?. Ningún Europeo con dos dedos de frente dudaría un instante en pulsar un botón mágico que hiciese desaparecer todas esas absurdas ideas de las cabezas de las personas que se matan por ellas. Pero como, amigos míos, no existe tal botón, no nos queda otra que enseñar, educar, erradicar la pobreza, y, sobre todo, predicar con el ejemplo limpiando primero nuestras tierras de estupideces, ya que resulta complicado enseñar que los hombres no pueden volar ni convertirse en trigre pero sí correr sobre las aguas de un lago o convertir el agua en vino. De lo contrario somos, a la hora de dar sabios consejos, como gigantes con pies de barro.
 

 

 Las fieras enjauladas  son mansas, inofensivas y hasta folclóricas, pero jamás olvidemos que un león es un león, por respeto y solidaridad para con aquellos que no disponen de zoológicos.

 

                                                                                                                                                  – I.C.R –

 
 
 
 

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Mira tú quién está hablando.

 

El mosqueo de los socialistas con el Vaticano podría servir para rebajar el impuesto que pagamos a la curiosa institución, pero lo dudo. Sorprende que los socialistas paguen a ese cuerpo de funcionarios cuyo jefe de Estado vive en un enclave italiano exento de impuestos. Aún más irresponsable es que les entregue la educación de niños y jóvenes. ¿No conocen la historia de la educación católica? ¿Pues de qué se quejan? Es como lamentar la agresividad separatista después de darles el poder. En Catalunya les han regalado todos los medios de persuasión públicos y la cultura en su totalidad, o sea, han entregado a los ideólogos el cerebro del niño. Que luego no se quejen.

La Iglesia católica, como todas las iglesias, se impone y manipula allí donde le dejan. Las iglesias son instituciones totalitarias y si no hay resistencia, se quedan con todo. Van soltando presas según se les desafía. No entienden otro lenguaje que la fuerza. Y así ha de ser. Las iglesias no están para remediar los males de este mundo sino para conducir a los creyentes a la vida verdadera, la cual está en otro mundo del que nadie ha regresado por lo bien que se está allí. Obsérvese la alegría de los suicidas islámicos. Es imposible que se comporten de otro modo. Si no trataran de imponerse por la maña o por la fuerza, pecarían. Y eso es lo peor que le puede pasar a un creyente.

Cuando le entrevistaban, el almirante Carrero Blanco solía decir que él era partidario de la bomba atómica porque prefería la destrucción de la humanidad antes que verla condenada al pecado. Y es lo que ha de pensar cualquiera que pertenezca a la religión católica, si es coherente. ¿Cómo va a permitir que la gente se condene? Si apretando un botón logra que cese el número de pecados mortales, no puede tener la menor vacilación. Bien es verdad que hay una parte de la política cada vez más cercana a la religión. ¿Recuerdan con quien corrió a fotografiarse Josep Lluís Carod-Rovira cuando le pillaron en alguna de sus siniestras aventuras? Con el abad de Montserrat. ¿Cómo van a pedirle ahora que se calle?.

                                                                                                                                  -Félix de Azúa-

PD: Dios mío !!!* Que he hecho!!! Soy catalán y he puesto en mi blog un texto de Félix de Azúa!!!Confíteor Deo omnipoténti,nimis cogitatione, verbo, opere et omissione.Mea culpa, mea culpa,mea maxima culpa!!!Azúa no es bueno, Azúa está loco..o aún peor;Azúa es del PP!!!De la Falange!!!!. Pues es mi blog, lo escribo en el puto idioma que me sale de los huevos y se lo dedico a todos aquellos que no nos creemos el puto ombligo del mundo. Y NO se los dedico, por supuesto, a aquellos sectarios ignorantes que se creen estupendos por haber nacido en Catalunya, en España,en Mozambique o donde cojones quiera que sus mentes hayan """evolucionado""". Así se os atraganten vuestras banderas de 1500 metros cuadrados.

 

*(licencia poética de un ateo convencido que sugiere extremada exclamación).

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ES NORMAL.

 
Vivo en Barcelona. Trabajo. Mi nómina no es para tirar cohetes, porque,como es normal "ESTE año no podemos subir el sueldo que la cosa está muy mal". Si cometo alguna infracción de tráfico, como es normal, el ayuntamiento me  cobra la multa en poco tiempo y sin problemas, y si no la pago, para mayor comodidad me la "domicilia" directamente en mi cuenta corriente. Como también es normal, si tengo mi poco dinero en mi banco, me dan un 0.1% de interés, ya que ,como es normal, es el porcentaje objetivamente justo.Si hacienda me reclama algo, no es necesario que lo pague, ya que, como es normal,me lo embargan directamente. Si telefónica me cobra por error 200 llamadas a Australia o Endesa me factura 100 Kilovatios en un més, como es normal, he de pagarlos inmediatamente y luego quejarme ante la injusticia durante meses o años, ya que hay mucho listillo que se inventa triquiñuelas para no pagar.Si creo que un grupo de multinacionales multimillonarias tienen la culpa de que tenga que pagar un piso a precio de un boeing 747 y si me da por meterme en el primero que encuentre me diran,como es normal, "hay un marco jurídico que TODOS debemos respetar…no podemos tomarnos todos la justica por nuestra mano….la base de la economía es la propiedad privada…",lógico y normal.Si la bolsa sube y,como es normal, en mi vida he podido comprar unas malditas acciones de nada,se forrarán de mala manera cuatro señores,ya que como es normal, las ganancias estan muy bien privatizadas. Todo muy normal.
 
Normal pero deprimente.Veamoslo desde otro punto de vista! Vuelvo a empezar.
 
Vivo en Barcelona. Trabajo para una empresa, que como es normal,ha aumentado un 20% sus beneficios este año, aproximadamente lo mismo que ha subido el IPC REAL. Si por alguna casualidad el ayuntamiento me debe algo, como es normal, deberé pleitear durante años con ellos con el consiguiente gasto en abogados y probablemente jamás vea un duro. Como también es normal, si pido algo de dinero al banco, me cobran un 20,27% TAE de interés, ya que ,como es normal, es el porcentaje objetivamente justo. Si es hacienda la que me debe,como es normal, deberé esperar meses y meses a que me hagan caso,si me lo hacen. Si pienso que telefónica me debe algo, como es normal, deberé ir a hacer compañía a los muchachos de SINTEL, ya que hay mucho listillo que se inventa triquiñuelas para cobrarles. Si un grupo de multinacionales multimillonarias me creen culpable de ver mermados sus gigantescos beneficios,como las discográficas, como es normal, me lo harán pagar bajo el eufemismo de "canon" sin que sirvan mis explicaciones sobre marcos jurídicos ni propiedades privadas ni chorradas estrambóticas para idiotas.Si la bolsa baja y,como es normal, en mi vida he podido comprar acciones de nada, tendré que pagar con mis impuestos gigantescas partidas del banco europeo para frenar la crisis, ya que las perdidas están realmente bien socializadas.

 

¿NORMAL? Pues empiezo a estar hasta los cojones…también normal. 

 

                                                                                                                                   – ICR –

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La religión como fuente de intolerancia e irracionalidad.

 

                                                               

 
 

En algún lugar del mundo un hombre ha secuestrado a una niña. Pronto la violará, la torturará y la asesinará. Si una atrocidad de esta clase no ocurre precisamente en este momento, ocurrirá en unas horas, o a lo sumo en unos días. Tal es el grado de confianza que podemos extraer de las leyes estadísticas que gobiernan las vidas de 6 mil millones de seres humanos. La misma estadística sugiere también que los padres de estas niñas creen en este mismo instante que un Dios omnipotente e infinitamente bondadoso cuida de ellos y de su familia. ¿Tienen alguna razón para creer esto? Es más, ¿está bien que lo crean?

La respuesta a ambas preguntas es muy clara: NO.                                                                                                       

Todo el ateísmo está contenido en la anterior respuesta. El ateísmo no es una filosofía; no es ni siquiera una opinión sobre el mundo; es simplemente el rechazo a negar lo evidente. Por desgracia, vivimos en un mundo en el que, por principio, lo evidente se pasa por alto. Lo evidente debe ser observado, vuelto a observar y defendido. Se trata de un trabajo ingrato. Lleva consigo una aureola de petulancia e insensibilidad. Además es un trabajo que el ateo no necesita.

Es preciso señalar que nadie necesita identificarse como un no-astrólogo o un no-alquimista. Por consiguiente, no tenemos ningún nombre para definir a las personas que niegan la validez de estas pseudo-disciplinas. De la misma forma, el ateísmo es un término que ni siquiera debería existir. El ateísmo no es más que la protesta manifestada por la gente razonable en presencia del dogma religioso. El ateo es simplemente una persona que cree que los 260 millones de americanos (el 87 % de la población) que afirman no dudar jamás de la existencia de Dios son los que están obligados a presentar pruebas de su existencia y, ciertamente, de su benevolencia, considerando la destrucción implacable de seres humanos inocentes de la que somos testigos a diario en el mundo. Sólo el ateo aprecia lo misteriosa que es nuestra presente situación: la mayor parte de los seres humanos creen en un Dios que, en todos los aspectos, es tan fantástico como los dioses del Olimpo; ninguna persona, independientemente de sus méritos y capacidades, puede acceder a un cargo público en los Estados Unidos si no afirma estar totalmente convencida de que ese Dios existe; y una gran parte de la política pública de nuestro país responde a tabúes religiosos y a supersticiones propias de una teocracia medieval. Nuestra circunstancia es abyecta, indefendible y aterradora. Podría incluso resultar graciosa si lo que estuviera en juego no fuera tan importante.

 

 

Vivimos en un mundo donde todas las cosas, buenas y malas, finalmente resultan destruidas por el cambio. Los padres pierden a sus hijos y los hijos a sus padres. Los maridos y las esposas se separan en un instante, para no reencontrarse jamás. Los amigos se apartan unos de otros con celeridad, sin saber que no volverán a verse. Esta vida, cuando se inspecciona con un amplio vistazo, presenta poco más que un enorme espectáculo de pérdidas. La mayoría de la gente de este mundo, sin embargo, se imagina que existe una cura para todo lo anterior. Si vivimos correctamente –no necesariamente de manera ética, sino dentro del marco de ciertas creencias antiguas y de comportamientos estereotipados– conseguiremos todo lo que queramos después de morir. Cuando finalmente nuestros cuerpos nos fallen, tan sólo nos desharemos de nuestro lastre corpóreo para viajar a una tierra donde nos reuniremos con todas las personas a las que amábamos cuando vivíamos. Por supuesto, la gente demasiado racional y demás chusma serán excluidas de ese lugar feliz, y los que hayan suspendido su incredulidad mientras vivían será libres de disfrutar de dicho lugar para toda la eternidad.

Vivimos en un mundo lleno de sorpresas inimaginables –desde la energía de fusión que hace que el sol brille, hasta las consecuencias genéticas y evolutivas de esta danza luminosa sobre la Tierra a lo largo de los eones– y, a pesar de todo, el Paraíso se conforma a nuestros intereses más superficiales con la misma comodidad que un crucero por el Caribe. Lo anterior resulta extraordinariamente curioso. Si uno no supiera nada del asunto, pensaría que el hombre, en su temor a perder todo aquello que le gusta, había creado el Cielo, con su Dios de portero, a su propia imagen y semejanza.

Consideremos la destrucción que el Huracán Katrina trajo sobre Nueva Orleans. Más de mil personas murieron, decenas de miles perdieron todos sus bienes terrenales, y casi un millón fueron desplazadas. Es casi seguro que prácticamente toda persona que vivía en Nueva Orleans en el momento de la tragedia del Katrina creía en un Dios omnipotente, omnisciente y compasivo. ¿Pero qué hacía Dios mientras un huracán arrasaba su ciudad? Seguramente oyó los rezos de los ancianos y las mujeres que huían de la crecida de las aguas buscando la seguridad de sus azoteas, sólo para ahogarse lentamente en éstas. Eran personas de fe. Eran hombres y mujeres buenos que habían rezado durante toda su vida. Sólo el ateo tiene el coraje de admitir lo evidente: esta pobre gente murió hablando con un amigo imaginario.

Desde luego, hubo claros signos de que una tormenta de dimensiones bíblicas golpearía a Nueva Orleans, y la respuesta humana al consiguiente desastre fue trágicamente inepta. Pero fue inepta sólo a la luz de la ciencia. Los signos del avance del Katrina fueron extraídos de la Naturaleza muda a través de cálculos meteorológicos y de imágenes vía satélite. Dios no habló a nadie de sus proyectos. Si los residentes de Nueva Orleans se hubieran contentado con confiar en la caridad del Señor, no se hubieran enterado de que un huracán asesino se abatía sobre ellos hasta sentir en sus caras las primeras ráfagas de viento. Sin embargo, una encuesta realizada por el Washington Post reveló que el 80 % de los sobrevivientes del Katrina afirmaban que el acontecimiento había reforzado su fe en Dios.

Mientras el Huracán Katrina devoraba Nueva Orleans, casi mil peregrinos chiítas eran pisoteados hasta morir en un puente de Irak. No hay duda de que estos peregrinos creían vigorosamente en el Dios del Corán: sus vidas estaban organizadas en torno al hecho indiscutible de su existencia; sus mujeres caminaban veladas delante de él; sus hombres se mataban entre sí con regularidad por interpretaciones rivales de su palabra. Sería notable que un solo superviviente de esta tragedia perdiera su fe. Es más probable que los supervivientes se imaginen que ellos fueron salvados por la gracia de Dios.

Sólo el ateo reconoce el narcisismo y el autoengaño ilimitados de quien se cree "salvado por Dios". Sólo el ateo comprende lo moralmente rechazable que es el hecho de que los supervivientes de una catástrofe se crean salvados por el amor de Dios, mientras este mismo Dios ha ahogado a niños en sus cunas. Puesto que el ateo se niega a disfrazar la realidad del sufrimiento del mundo con una empalagosa fantasía de vida eterna, el ateo siente en sus carnes lo preciosa que es la vida —y qué terrible desgracia es realmente que millones de seres humanos sufran el más terrible menoscabo de su felicidad por ninguna razón en absoluto.

 

 

Es inevitable preguntarse cuán enorme y gratuita debe ser una catástrofe para que sacuda la fe del mundo. El Holocausto nazi no lo hizo. Tampoco el genocidio de Ruanda, aunque hubiera sacerdotes armados con machetes entre los autores. Quinientos millones de personas murieron de viruela en el siglo XX, muchos de ellos niños. Los caminos de Dios son ciertamente inescrutables. Parece que cualquier hecho, no importa lo desgraciado que sea, puede ser compatible con la fe religiosa. En los asuntos de la fe, hemos perdido cualquier tipo de contacto con la realidad.

Desde luego, las personas de fe afirman regularmente que Dios no es responsable del sufrimiento humano. ¿Pero de qué otro modo podemos entender la afirmación de que Dios es a la vez omnisciente y omnipotente? No hay ningún otro modo de entender el asunto, y es hora de que los seres humanos cuerdos lo asuman. Se trata del problema histórico de la teodicea, que deberíamos considerar ya resuelto. Si Dios existe, no puede hacer nada para detener las más terribles calamidades o no se preocupa por hacerlo. Dios, por lo tanto, es impotente o malvado. Los lectores piadosos realizarán ahora la siguiente pirueta: Dios no puede ser juzgado por las simples normas humanas de moralidad. Pero, desde luego, las normas humanas de moralidad son precisamente las que los fieles emplean en primer lugar para establecer la bondad de Dios. Y cualquier Dios que se preocupe por algo tan trivial como el matrimonio gay, o el nombre por el que los fieles se dirigen a él durante el rezo, no es tan inescrutable como parece. Si existiera, el Dios de Abraham sería bastante despreciable: no sólo sería indigno de la inmensidad de la creación, sino que sería indigno hasta del propio ser humano.

Hay otra posibilidad, desde luego, y es a la vez la más razonable y la menos odiosa: el Dios bíblico es una ficción. Como ha observado Richard Dawkins, todos somos ateos en lo que concierne a Zeus y Thor. Sólo el ateo ha comprendido que el dios bíblico no es en absoluto diferente de Zeus o de Thor. Por consiguiente, sólo el ateo es lo bastante compasivo para considerar la profundidad del sufrimiento humano en toda su abrumadora realidad. Es terrible que muramos y perdamos todo lo que nos gusta; es doblemente terrible que tantos seres humanos sufran innecesariamente mientras viven. Que gran parte de este sufrimiento pueda ser atribuido directamente a la religión –a los odios religiosos, las guerras religiosas, las ilusiones religiosas y las luchas religiosas por recursos escasos– es lo que hace del ateísmo una necesidad moral e intelectual. Es una necesidad, sin embargo, que sitúa al ateo en los márgenes de la sociedad. El ateo, sólo por mantenerse en contacto con la realidad, aparece vergonzosamente alejado de la vida de fantasía propia de sus vecinos.

La naturaleza de la creencia

Según varias encuestas recientes, el 22 % de los americanos están totalmente convencidos de que Jesús volverá a la Tierra algún día durante los próximos 50 años. Otro 22 % cree que lo anterior es bastante probable. Seguramente este mismo 44 % de americanos son los que van a la iglesia una vez por semana o más, que creen literalmente que Dios prometió la tierra de Israel a los judíos, y que quieren prohibir la enseñanza del hecho biológico de la evolución a nuestros hijos. Como bien sabe el Presidente George W. Bush, los creyentes de esta categoría constituyen el segmento más cohesionado y motivado del electorado americano. Por consiguiente, sus opiniones y prejuicios influyen en casi todas las decisiones de importancia nacional. Los políticos liberales parecen haber extraído una lección incorrecta de estos acontecimientos y han vuelto su mirada hacia las Escrituras, preguntándose cómo podrían congraciarse con las legiones de hombres y mujeres de nuestro país que votan en gran parte en base al dogma religioso. Más del 50 % de los americanos tiene una opinión "negativa" o "sumamente negativa" de la gente que no cree en Dios; el 70 % piensa que es muy importante que los candidatos a la presidencia sean "firmemente religiosos". La irracionalidad se encuentra ahora en ascenso en los Estados Unidos –en nuestras escuelas, en nuestros tribunales y en cada rama del gobierno federal. Sólo el 28 % de los americanos cree en la evolución; el 68 % cree en Satán. Una ignorancia de este calibre, concentrada tanto en la cabeza como en el vientre de una superpotencia sin rival, es ahora un problema para el mundo entero.

 

 

Aunque sea bastante fácil para la gente de buen tono criticar el fundamentalismo religioso, la llamada "moderación religiosa" todavía disfruta de un gran prestigio en nuestra sociedad, incluso dentro de la torre de marfil. Lo anterior resulta irónico, ya que los fundamentalistas tienden a hacer un uso de sus cerebros más basado en principios que los "moderados". Aunque los fundamentalistas justifiquen sus creencias religiosas con pruebas y argumentos extraordinariamente pobres, al menos intentan dar una justificación racional. Los moderados, en cambio, generalmente no hacen más que citar las consecuencias benéficas de la creencia religiosa. En lugar de decir que creen en Dios porque ciertas profecías bíblicas se han cumplido, los moderados dirán que ellos creen en Dios porque esta creencia "da sentido a sus vidas".

Cuando un tsunami mató a cien mil personas el día siguiente al de Navidad, los fundamentalistas interpretaron fácilmente este cataclismo como una prueba de la ira de Dios. Al parecer, Dios había enviado otro mensaje oblicuo a la humanidad sobre los males del aborto, la idolatría y la homosexualidad. Aunque moralmente obscena, esta interpretación de los acontecimientos es ciertamente razonable, considerando ciertas suposiciones (absurdas). Los moderados, en cambio, rechazan extraer cualquier conclusión sobre Dios a partir de sus obras. Dios sigue siendo un perfecto misterio, una mera fuente de consuelo que es compatible con la existencia del mal más desolador. Ante desastres como el tsunami asiático, la piedad liberal es apta para producir las más afectadas y pasmosas tonterías imaginables. Así y todo, los hombres y mujeres de buena voluntad prefieren habitualmente tales vacuidades a la moralización y profetización odiosas de los creyentes auténticos. Ante las catástrofes, sin duda es una virtud de la teología liberal que ésta enfatice la piedad sobre la ira. Vale la pena señalar, sin embargo, que es la piedad humana lo que se revela –no la de Dios– cuando los cuerpos hinchados de los muertos son arrojados por el mar. Durante días, cuando miles de niños son arrancados al mismo tiempo de los brazos de sus madres y ahogados en el mar, la teología liberal debe revelarse como lo que es –el más vacuo y estéril de los pretextos mortales. Incluso la teología de la ira tiene más mérito intelectual. Si Dios existe, su voluntad no es inescrutable. Lo único inescrutable en estos hechos terribles es que hombres y mujeres neurológicamente sanos puedan creer lo increíble y pensar que es la cumbre de la sabiduría moral.

Es completamente absurdo sugerir, como hacen los religiosos moderados, que un ser humano racional pueda creer en Dios simplemente porque esta creencia le hace feliz, porque alivia su miedo a la muerte o porque otorga sentido a su vida. La absurdidad se hace obvia en el momento en que cambiamos la noción de Dios por alguna otra proposición de consuelo: imaginemos, por ejemplo, que un hombre quiere creer que existe un diamante enterrado en algún lugar de su patio trasero, y que ese diamante es del tamaño de un refrigerador. Sin duda, se sentirá extraordinariamente bien al creer esto. Imaginemos qué pasaría entonces si ese hombre siguiera el ejemplo de los religiosos moderados y mantuviera dicha creencia según líneas pragmáticas: cuando se le pregunta por qué piensa que hay un diamante en su patio trasero y que además ese diamante es miles de veces mayor que ninguno aún descubierto, el hombre dice cosas como las siguientes: "Esta creencia da sentido a mi vida", o "Mi familia y yo disfrutamos cavando para encontrarlo los domingos", o "Yo no querría vivir en un universo donde no hubiera un diamante enterrado en mi patio trasero y que fuera del tamaño de un refrigerador". Claramente estas respuestas son inadecuadas. Pero son peores que esto. Son las respuestas de un loco o de un idiota.

Aquí podemos ver por qué la apuesta de Pascal, el salto de fe de Kiergegaard y otros esquemas epistemológicos fideístas no tienen el menor sentido. Creer que Dios existe es creer que uno se encuentra en alguna relación con su existencia, tal que dicha existencia es ella misma la razón de la creencia de uno. Debe haber alguna conexión causal, o al menos una apariencia de la misma, entre el hecho en cuestión y la aceptación de ese hecho por parte de la persona. De este modo, podemos ver que las creencias religiosas, para ser creencias sobre el modo en que es el mundo, deben ser tan probatorias en el ámbito del espíritu como en cualquier otro ámbito. Pese a todos sus pecados contra la razón, los fundamentalistas religiosos entienden esto; los moderados –casi por definición– no lo entienden en absoluto.

La incompatibilidad entre la razón y la fe ha sido un rasgo evidente de la cognición humana y del discurso público durante siglos. Una persona tiene buenas razones para creer firmemente lo que cree o lo que no cree. Las personas de todos los credos generalmente reconocen la primacía de las razones, y recurren al razonamiento y a las pruebas siempre que pueden. Cuando la indagación racional apoya el credo, aquélla siempre es defendida; cuando representa una amenaza, es ridiculizada, a veces en la misma sentencia. Sólo cuando las pruebas a favor de una doctrina religiosa son escasas o inexistentes, o existe una evidencia aplastante en su contra, sus defensores invocan la "fe". Dicho de otro modo, los fieles simplemente citan los motivos para defender sus creencias (por ejemplo, "el Nuevo Testamento confirma las profecías del Antiguo testamento", "yo vi la cara de Jesús en una ventana", "rezamos, y el cáncer de nuestra hija comenzó a remitir"). Tales razones son generalmente inadecuadas, pero son mejores que ninguna razón en absoluto. La fe no es más que la licencia que la gente religiosa se otorga a sí misma para seguir creyendo cuando las razones fallan. En un mundo que ha sido dividido por creencias religiosas mutuamente incompatibles, en una nación que se encuentra cada vez más sometida a concepciones propias de la Edad de Hierro acerca de Dios, el final de historia y la inmortalidad del alma, esta división perezosa de nuestro discurso en asuntos de razón y asuntos de fe es sencillamente inadmisible.

La fe y la buena sociedad

La gente de fe afirma regularmente que el ateísmo es responsable de algunos de los crímenes más espantosos del siglo XX. Aunque sea cierto que los regímenes de Hitler, Stalin, Mao y Pol Pot eran irreligiosos en diversos grados, no eran especialmente racionales. De hecho, sus declaraciones públicas eran poco más que letanías de ilusiones –ilusiones sobre la raza, la identidad nacional, la marcha de la historia o los peligros morales del intelectualismo. En muchos sentidos, la religión fue directamente culpable aún en estos casos. Consideremos el Holocausto: el antisemitismo que construyó pieza a pieza los crematorios nazis era una herencia directa del cristianismo medieval. Durante siglos, los alemanes religiosos habían visto a los judíos como la peor especie de herejes, y habían atribuido todos los males sociales a su presencia continuada entre los fieles. Mientras que el odio a los judíos en Alemania se expresaba de un modo predominantemente secular, la demonización religiosa de los judíos continuó existiendo en Europa. (El propio Vaticano perpetuó el libelo de la sangre en sus publicaciones, en una fecha tan tardía como 1914.)

Auschwitz, el Gulag y los campos de la muerte no son ejemplos de lo que ocurre cuando la gente se hace demasiado crítica con las creencias injustificadas; al contrario, estos horrores son un testimonio de los peligros que conlleva el no pensar lo bastante críticamente sobre ideologías seculares específicas. Está de más decir que un argumento racional contra la fe religiosa no es un argumento para abrazar ciegamente el ateísmo como dogma. El problema expuesto por el ateo no es otro que el problema del dogma mismo –del que toda religión participa en un grado extremo. No existe ninguna sociedad en la historia escrita que haya sufrido porque su gente se volviera demasiado razonable.

Aunque la mayor parte de los americanos creen que deshacerse de la religión es un objetivo imposible, la mayor parte del mundo desarrollado ya lo ha logrado. Cualquier relato sobre un supuesto "gen religioso", que haga que la mayoría de los americanos organicen desvalidamente sus vidas alrededor de antiguas obras de ficción religiosa, debe explicar por qué tantos habitantes de otras sociedades del Primer Mundo parecen carecer de dicho gen. El nivel de ateísmo existente en el resto del mundo desarrollado refuta cualquier argumento de que la religión sea de algún modo una necesidad moral. Países como Noruega, Islandia, Australia, Canadá, Suecia, Suiza, Bélgica, Japón, Países Bajos, Dinamarca y el Reino Unido se encuentran entre las sociedades menos religiosas de la Tierra. Según el Informe de Desarrollo Humano 23005 de las Naciones Unidas, dichos países son también los más sanos, como indican las medidas de esperanza de vida, alfabetismo adulto, ingresos per capita, desarrollo educativo, igualdad sexual, tasa de homicidios y mortalidad infantil. A la inversa, las 50 naciones que ahora se encuentran en el escalafón más bajo en términos de desarrollo humano son fuertemente religiosas. Otros análisis reflejan la misma situación: los Estados Unidos son únicos entre las democracias ricas por su nivel de fundamentalismo religioso y por su oposición a la teoría evolutiva; también son únicos por las altas tasas de homicidio, abortos, embarazos de adolescentes, casos de SIDA y mortalidad infantil. La misma comparativa es cierta dentro del territorio de los Estados Unidos: los Estados del Sur y del Medio Oeste, caracterizados por los niveles más altos de superstición religiosa y de hostilidad hacia la teoría evolutiva, están especialmente afectados por los mencionados indicadores de disfunción social, mientras que los estados relativamente seculares del Noreste se conforman más a las normas europeas. Desde luego, los datos correlacionales de esta clase no resuelven las cuestiones de causalidad –la creencia en Dios puede conducir a la disfunción social; la disfunción social puede dar lugar a la creencia en Dios; cada factor puede fomentar el otro; o bien ambos factores pueden surgir de alguna fuente más profunda de disfuncionalidad. Dejando aparte la cuestión de la causa y el efecto, estos hechos demuestran que el ateísmo es absolutamente compatible con las aspiraciones básicas de una sociedad civil; también demuestran, de manera concluyente, que la fe religiosa no hace nada para asegurar la salud y el bienestar de una sociedad.

Los países con altos niveles de ateísmo también son los más caritativos en términos de la prestación de ayuda extranjera al mundo en desarrollo. El dudoso eslabón existente entre el fundamentalismo cristiano y los valores cristianos también es refutado por otros índices de caridad. Consideremos la proporción entre los salarios de los altos ejecutivos y de los empleados medios: en Gran Bretaña es de 24 a 1; en Francia, de 15 a 1; en Suecia, de 13 a 1; en los Estados Unidos, donde el 83 % de la población cree que Jesús literalmente resucitó de entre los muertos, es de 475 a 1. Parece que muchos camellos esperan entrar fácilmente por el ojo de la aguja.

                                               

 
 

                                                                                                

La religión como fuente de violencia

Uno de los mayores desafíos afrontados por la civilización en el siglo XXI es que los seres humanos aprendan a hablar sobre sus intereses personales más profundos –sobre la ética, la experiencia espiritual y la inevitabilidad del sufrimiento humano– de un modo que no sea flagrantemente irracional. Nada obstaculiza más el camino de este proyecto que el respeto que concedemos a la fe religiosa. Doctrinas religiosas incompatibles han balcanizado nuestro mundo en comunidades morales separadas –cristianos, musulmanes, judíos, hindúes, etc.– y estos desacuerdos se han convertido en una fuente continua de conflicto humano. Ciertamente, la religión es hoy en día una fuente activa de violencia, tanto como lo fue en cualquier momento del pasado. Los conflictos recientes en Palestina (judíos contra musulmanes), los Balcanes (serbios ortodoxos contra croatas católicos; serbios ortodoxos contra musulmanes bosnios y albaneses), Irlanda del Norte (protestantes contra católicos), Cachemira (musulmanes contra hindúes), Sudán (musulmanes contra cristianos y animistas), Nigeria (musulmanes contra cristianos), Etiopía y Eritrea (musulmanes contra cristianos), Sri Lanka (budistas cingaleses contra hindúes tamiles), Indonesia (musulmanes contra cristianos timoreses), Irán e Irak (musulmanes chiítas contra musulmanes sunníes), y Cáucaso (rusos ortodoxos contra musulmanes chechenos; musulmanes azerbaijanos contra armenios católicos y ortodoxos) son simplemente algunos ejemplos. En estos lugares, la religión ha sido la causa explícita de literalmente millones de muertos en los últimos 10 años.

En un mundo dividido por la ignorancia, sólo el ateo rechaza negar lo evidente: la fe religiosa promueve la violencia humana a un nivel asombroso. La religión inspira la violencia en al menos dos sentidos: (1) a menudo las personas matan a otros seres humanos porque creen que el Creador del Universo quiere que así lo hagan (el corolario psicopático inevitable es que tal acto les asegurará una eternidad de felicidad después de la muerte). Los ejemplos de este tipo de comportamiento son prácticamente innumerables, siendo el más destacado el de los terroristas suicidas jihadistas. (2) Un número cada vez mayor de personas se encuentran inclinadas hacia el conflicto religioso, simplemente porque su religión constituye el corazón de sus identidades morales. Una de las patologías duraderas de la cultura humana es la tendencia a educar a los niños en el temor y a demonizar a otros seres humanos en base a la religión. Muchos conflictos religiosos que parecen motivados por intereses terrenales son, por lo tanto, de origen religioso. (Que se lo pregunten a los irlandeses.) A pesar de todos estos hechos innegables, los religiosos moderados tienden a imaginarse que el conflicto humano es siempre reducible a la carencia de educación, a la pobreza o a los agravios políticos. Ésta es una de las muchas ilusiones de la piedad liberal. Para disiparla, sólo tenemos que pensar en el hecho de que los secuestradores del 11-S eran universitarios de clase media-alta que no tenían ninguna historia conocida de opresión política. Sin embargo, habían pasado una cantidad de tiempo excesiva en su mezquita local, oyendo hablar de la depravación de los infieles y de los placeres que esperan a los mártires en el Paraíso. ¿Cuántos arquitectos e ingenieros mecánicos deberán volver a estrellarse contra una pared a 400 millas por hora, antes de que admitamos que la violencia jihadista no es un asunto de educación, política o pobreza? La verdad, bastante asombrosa, es la siguiente: una persona puede ser tan instruida que sea capaz de construir una bomba nuclear, y así y todo creer que conseguirá a 72 vírgenes en el Paraíso para toda la eternidad. Tal es la facilidad con que la mente humana puede ser alienada por la fe, y tal es el grado de acomodación de nuestro discurso intelectual a la ilusión religiosa. Sólo el ateo ha observado lo que ahora debería ser evidente para todo ser humano pensante: si queremos desarraigar las causas de la violencia religiosa debemos desarraigar las falsas certezas de la religión.

¿Por qué la religión es una fuente tan poderosa de violencia humana?

Nuestras religiones son intrínsecamente incompatibles entre sí. Jesús resucitó de entre los muertos y volverá a la Tierra como un superhéroe, o no; el Corán es la palabra infalible de Dios, o no lo es. Cada religión hace afirmaciones explícitas sobre el modo en que es el mundo, y la profusión abrumadora de estas afirmaciones incompatibles –que además son dogmas de fe obligatorios para todos los creyentes– crea una base duradera para el conflicto.

No hay ninguna otra esfera del discurso en la que los seres humanos articulen de manera tan clara sus diferencias mutuas, o en la que expresen estas diferencias en términos de recompensas y castigos eternos. La religión es la única realidad humana en la que el pensamiento nosotros-ellos alcanza una importancia trascendente. Si una persona cree realmente que llamar a Dios por su nombre correcto puede marcar la diferencia entre la felicidad eterna y el sufrimiento eterno, entonces se hace bastante razonable tratar más bien mal a los herejes e incrédulos. Hasta puede ser razonable matarlos. Si una persona piensa que hay algo que otra persona puede decirles a sus hijos que podría poner sus almas en peligro para toda la eternidad, entonces el vecino hereje es en realidad mucho más peligroso que el más sádico violador infantil. Los estigmas de nuestras diferencias religiosas son enormemente más pronunciados que los nacidos del mero tribalismo, del racismo o de la política.

La fe religiosa es un poderoso obstáculo al diálogo. La religión no es más que el área de nuestro discurso en la que la gente se protege sistemáticamente de la exigencia de aportar pruebas en defensa de sus creencias firmemente sostenidas. Y así y todo, estas creencias de las personas a menudo determinan para qué viven, para qué morirán, y –demasiado a menudo– para qué matarán. Éste es un problema muy grave, porque cuando los estigmas diferenciales son muy pronunciados los seres humanos sólo tienen una opción entre el diálogo y la violencia. Sólo una buena voluntad fundamental de ser razonable –de modo que nuestras creencias sobre el mundo sean revisadas por nuevas pruebas y nuevos argumentos– puede garantizar que sigamos hablando entre nosotros. La certeza sin pruebas es necesariamente divisoria y deshumanizadora. Aunque no existe ninguna garantía de que la gente racional siempre vaya a estar de acuerdo, indudablemente la gente irracional siempre estará dividida por sus dogmas. Parece sumamente improbable que podamos curar los desacuerdos existentes en nuestro mundo simplemente multiplicando las ocasiones para el diálogo interconfesional.

El objetivo de la civilización no puede ser la tolerancia mutua ni la irracionalidad manifiesta. Aunque todos los partidarios del discurso religioso liberal han acordado pasar de puntillas por aquellos puntos en los que sus visiones del mundo chocan frontalmente, esos mismos puntos seguirán siendo fuentes de conflicto perpetuo para sus correligionarios. La corrección política, por lo tanto, no ofrece una base duradera para la cooperación humana. Si la guerra religiosa debe hacerse inconcebible para nosotros, del mismo modo que ya lo son la esclavitud y el canibalismo, ello sólo será posible si prescindimos de todos los dogmas de fe.

Cuando tenemos razones para creer lo que creemos, no tenemos ninguna necesidad de fe; cuando no tenemos ninguna razón, o sólo tenemos malas razones, hemos perdido nuestra conexión con el mundo y con los seres humanos. El ateísmo no es sino un compromiso con el nivel más básico de honestidad intelectual: las convicciones de una persona deberían ser proporcionales a sus pruebas. Pretender estar seguro de algo cuando no se está –en realidad, pretender estar seguro sobre proposiciones para las que ni siquiera es concebible prueba alguna– es un defecto tanto intelectual como moral. Sólo el ateo ha comprendido esto. El ateo es simplemente una persona que ha percibido la mentira de la religión y que ha rechazado convertirla en una mentira propia.

 

 

Sam Harris es doctor en neurología por la universidad de Stanford (California), escritor y presentador de diversos programas y documentales de divulgación científica.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
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UBI DUBIUM IBI LIBERTAS: Donde hay duda,hay libertad (proverbio latino).

 

A los sres. Rouco, Blazquez y CIA : 

 

Hasta hace unos instantes dudaba si empezar el texto con la pertinente frase "!!Hatajo de sinvergüenzas!!", para evitar sentir en propias carnes la crítica de "anticlericalismo casposo y decimonónico" utilizada por Jorge Fernández Díaz contra el gobierno hace pocos días. Pero si algo me distingue de las gentes del PP en general y de Jorge Fernández en particular, es mi manía por informarme de las cosas antes de opinar. Así pues, una vez más, el diccionario de la real academia de la lengua española ha despejado mis dudas. La primera acepción que recoge el diccionario de la palabra "anticlericalismo" es "Doctrina o procedimiento contra el clericalismo". Busquemos pues Clericalismo, me he dicho. Y, para mi sorpresa, el clericalismo es, ni más ni menos que la "Influencia excesiva del clero en los asuntos políticos". Me doy por informado.La postura del Sr. Fernández ha quedado clarísima y mis temores han desaparecido. A diferencia de el ,soy total y absolutamente anticlericalista, y, por tanto, empezaré mi texto de la manera prevista.

 

 !!Hatajo de sinvergüenzas!!,!!Vosotros ya habéis tenido vuestra oportunidad!!!. Quince siglos, ni mas ni menos, habéis tenido de margen para haber hecho literalmente lo que os ha dado la gana, y escritos en la historia con letras de sangre han quedado. Llevasteis a Europa a la edad de las tinieblas permanentes. Tinieblas para el conocimiento, tinieblas para el saber, tinieblas para la investigación, tinieblas para la verdad, tinieblas para la decencia, tinieblas para el sentido común, tinieblas para la inteligencia y para la razón, pero mucha luz para vuestras arcas, mucha luz para vuestras mentiras, mucha luz para vuestros sádicos caprichos, mucha luz para vuestros delirios y aun más luz para vuestro poder. Quince siglos estuvisteis y así de bonito nos fue y ahora queréis volver por  3 años y medio de unas políticas correctas y decentes que vosotros y vuestra casposa y decimonónica criatura mitológica Yahvé -aquí SI están bien empleados los epítetos- consideráis nefastos debido a vuestro sistema de creencias tan antiguo y atrasado como vuestro dios. ¿Que coño hacéis en pleno siglo XXI vendiendo mitología antigua como verdad  fundamental? ¿Os dais cuenta de que vuestros valores, que tan afanosa y abyectamente disfrazáis de "ley natural" son los de un pueblo que vivió en la EDAD DE BRONCE??. No os preocupéis, son preguntas retóricas, es muy evidente que no os dais cuenta de absolutamente nada.

 

 Como es obvio que la historia no es lo vuestro y la lógica desde luego tampoco, os invito simplemente a mirar lo que hacen vuestros colegas, los gurús de las otras religiones, en el resto de países donde la sociedad civil no les mantiene la boca bien cerrada. Basta con que pongáis un telediario (Si, si, el de telemadrid también vale para este propósito) :  musulmanes sunitas mueren a manos de musulmanes chiitas en Argelia, musulmanes chiitas mueren por atentado con bomba perpetrado por musulmanes sunitas en Pakistán, miles de musulmanes chiitas y sunitas mueren a diario en Irak , turistas americanos mueren  acribillados por fanáticos religiosos en Egipto, islamistas sauditas estrellan aviones contra rascacielos, centenares de Brahims en Cachemira ejecutados por Hindúes, millones de asesinados o desplazados en la India en nombre del Hinduismo, el Shikismo o el Islam, guerra entre católicos y protestantes en el Ulster (Irlanda del Norte), mutilaciones de los órganos sexuales femeninos (circuncisión femenina) en las niñas de diversos países de Asia y África en nombre del Cristianismo y el Islamismo, años de apartheid en Sudáfrica bajo el manto de la iglesia protestante, guerra civil entre hindúes y budistas en Sri Lanka, la interminable “intifada” Palestina por la ocupación de judíos ultra ortodoxos de Gaza y Cisjordania (“porque es el deseo de Yahvé”, escrito en el antiguo testamento, -pero en contra de todas las resoluciones de la ONU-) y un largísimo etcétera.

 

 Por fortuna para todos, en algunos países entre los que se encuentra España, gozamos de un estado de laico de libertad en que todo y todos tenemos cabida sin ningún temor a ser represaliados. Si, incluso vosotros. Podéis salir con toda la desvergüenza del mundo a proclamar que los niños son viciosos por que os provocan, podéis seguir con vuestros vicios sexuales confesando "pecadillos" a niños y niñas indefensos que por edad aún se tragan vuestras mentiras -siendo legal incluso  que los ignorantes padres os los traigan a vuestras oscuras madrigueras-, podéis seguir vendiendo parcelas de cielo a buen precio, cobrando en euros los matrimonios y divorcios (perdón, nulidades)que vuestro dios hace gratis, y podéis seguir desinformando, mintiendo e indoctrinando a niños en vuestros colegios sin pagar impuestos, por citar unos pocos ejemplos. Todo eso y mucho más es absolutamente legal simplemente porque no dejamos que alucinados e impertinentes como vosotros gobiernen nada mas que su propio rebaño de alucinados e impertinentes.¿Que pasaría si los árabes se manifiestan porque "se" come carne de cerdo? ¿Y si lo hicieran los judíos porque no "se" circuncida a los niños?¿O los hindúes porque la gente no "se" purifica en el lodazal del delta del Ebro?. A todos ellos -con vosotros a la cabeza-, lo razonable es decirles "haced lo que os de la gana, pero dejad en paz al resto del mundo, que tal vez tenemos otro dios que se enfada por otras cosas y no por esas, o tal vez no tenemos ninguno".

 

 Vosotros, que no os manifestasteis contra una guerra de Irak que a día de hoy sigue produciendo cientos de cadáveres a diario, os quejáis contra la legalidad de un matrimonio civil que  jamás  habéis reconocido como válido. Porque, no lo olvidemos, según vuestro colectivo (exactamente igual que el resto de colectivos religiosos), no hay matrimonio válido si no es por vuestro rito. Y ya instalados en el despropósito permanente, no es de extrañar pues que os quejéis de un divorcio sobre un matrimonio que no habéis reconocido previamente.  La pregunta es: ¿A vosotros que COÑO os importa?. Si YO no soy cristiano, y decido casarme por el rito hawaiano a ojos de los grandes dioses TIKI y NALU, obviamente para vosotros NO estoy casado, por lo tanto ¿Que problema veis a que me divorcie cuando, como y de quién me da la puta gana? !A lo mejor a mi dios le encantan los divorcios! O, en otras palabras, ¿PORQUE NO DAIS EL COÑAZO SOLO A VUESTROS PRIVILEGIADOS FELIGRESES IGUAL QUE HACEN EL RESTO DE SECTAS EN ESPAÑA??.Ah, lo olvidaba, que la vuestra es la buena…y para colmo si me divorcio por lo civil no veis un duro.

 

 Mi opinión más visceral es que deberías ser prohibidos por ley, igual que el resto de sectas absurdas y peligrosas, vuestros líderes detenidos y vuestras propiedades subastadas y dedicadas -esta vez si- a fines sociales, pero como a diferencia de otros, intento no pensar con las vísceras, lo que me dicta la razón es que en aras de la libertad cada cual haga lo que le dé la gana. Si vosotros estáis contentos con vuestro poder y dinero y vuestra piara de feligreses lo están porque ya se ven retozando en algún paraíso espacial luciendo unas fabulosas alitas de plumas, pues me alegro por vosotros. Aunque en ocasiones, la libertad mal entendida sea como la democracia, el menos malo de los sistemas.

 

 

  " No debemos creer a los muchos que dicen que solo se ha de educar al pueblo libre, sino más bien a los filósofos que dicen que solo los cultos son libres." -Epícteto de Frigia-.Filósofo griego y esclavo romano.Siglo I.

 

 

      

                                                                                                                                                                              – I.C.R-

 

                                                          

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nacionalismo periodistico

 
 
Los políticos, sean  de derechas o de izquierdas, españolistas o nacionalistas periféricos, son por definición insaciables en su relación con los medios de comunicación: toda crítica es injusta, todo elogio es insuficiente. Los ministros se quejan de que TVE no publicite su gestión; los consellers de CiU achacaban veleidades socialistas a cierto presentador de TV-3; y, ahora, el PSC se escandaliza de que las emisoras de la Generalitat alienten una marcha soberanista. Nada nuevo bajo el sol, pues. Acaso, que un partido en el Govern, Esquerra, y otro en la oposición, CiU, coincidan en defender la neutralidad de los medios públicos. Lo cual es algo más que sospechoso.
 
Porque, aunque el léxico de del conseller socialista Ferran no fuera el más adecuado, nadie ha negado la preponderancia del discurso nacionalista, cuando no independentista, en las emisoras públicas catalanas. Más bien al contrario, puesto que muchos la han justificado con un argumento falaz que les delata: si el Estatut reza en su preámbulo que Cataluña es una "nación", los medios propiedad de la Generalitat deben ser por fuerza "nacionales". Y hete aquí la siempre interesada confusión: ¿acaso nacional es sinónimo de nacionalista? Salvo que se persiga una nación étnicamente pura y monolingüe, tan nacional debe ser considerado el castellanohablante que no vota en las autonómicas como el patriota que solo habla catalán y se manifiesta por el dret a decidir.

Los periodistas deben reflejar la Cataluña real, que es plural: la de quienes se sonríen con el humor político del Polònia y la de los que, en similar número, se carcajean con españoladas como Escenas de matrimonio. Pero ese deber es aún mayor para los medios públicos, que, siendo sufragados por todos, no pueden dirigirse solo al convergent emprenyat, más dolido porque ya no mandan los suyos que por los fallos de Cercanías. No olvidemos que el trazado del AVE que tantos quebraderos de cabeza esta dando fue una modificación impulsada por CiU, del que ahora recogemos los frutos. Algo asi como el Eix Transversal, obra magna de la era Pujol y que se demostró infradimensionado desde el mismo momento de su puesta en funcionamiento.
 
TV-3 ya cedió el liderazgo de audiencia en Cataluña a la muy española Tele 5, y Antena 3 le pisa los talones. Si no rectifica, el apelativo de nacional será puramente honorífico y acabaremos conviertiendo los medios audiovisuales catalanes en medios  etnico-folcloricos, mas cercanos a un nodo de señera, castellers y calçots que a los medios que una comunidad avanzada como la catalana se merece para el siglo XXI; y es que el mero hecho de envolver cualquier acción política con una señera y el apelativo nacional no le otorga, por arte de birlibirloque, una naturaleza intrinsecamente superior, elevándola por encima del bien y del mal y alejandola de cualquier discusión sobre su idoneidad (cuando no de su mediocridad); como no convertía en gloriosas las hazañas del generalísimo el mero hecho de envolverlas en gigantescas banderas españolas con aguilas imperiales, ni libra a Aznar de ser colaborador necesario en el asesinato de miles de iraquíes la gigantesca bandera de la plaza de Colón. El envasado en enseñas nacionales ha sido siempre recurso de  mentecatos, más próximos a una política de farándula y pandereta (o calçots, tanto da), que de políticos con ciertas miras.
 
                                                                                                                                         J.A.M
                                                                                                         

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